Piazza Navona

Piazza Navona es un lugar emblemático en el corazón de la vieja Roma. Todo un exponente del barroco italiano, patente en la Fontana de los Cuatro Ríos, magistral obra de Bernini que representa a los quattro fiumini más importantes del mundo hasta su construcción. Allá en 1651. El Nilo, en África. El Danubio, en Europa. El Ganges, en Asia. Y Río de la Plata, en América. Que ignora al Amazonas, descubierto por Orellana en 1541. Pero que probablemente para Bernini era todavía un gran desconocido. La Fuente de los Cuatro Ríos está escoltada por otras dos, a ambos extremos de la plaza. La llamada Fontana de Nettuno, frente a via Lorenesi, y la del Moro, ya en dirección a Campo dei Fiori, ambas de Giacomo della Porta. Remata la fuente de Bernini un impresionante obelisco egipcio que por encargo del emperador Domiciano fue tallado en el siglo I en Aswan como culto a su personalidad. No en vano, Piazza Navona discurre por lo que fue el stadium (circo) de este emperador. Último de la dinastía flavia. Asesinado de siete puñaladas a punto de cumplir 45 años. Fruto de las conspiraciones de cámara a las que se enfrentaban los mandatarios romanos. Domiciano fue un emperador autócrata. Que adoraba a Minerva. Que implantó en Roma los juegos capitolino (los agone, de ahí Navona). Que trajo a su arena imperial a los mejores gladiadores. Tres de ellos -ya libertos- participaron en su asesinato, urdido por Patronio, camarlengo imperial, y un grupo de oficiales de la guardia pretoriana, además de otros siervos traidores. De las ruinas del circo surgió esta plaza, a la que dio solemnidad el papa Inocencio X. De la familia Pamphili. Que encargó primero a Reinaldi y después a Borromini levantar una impresionante basílica que diera culto a Santa Agnese (Inés) in Agone. Mártir cristiana de aquella arena que atraía peregrinos de todos los rincones de Roma. Y cuyas reliquias recibían culto desde el siglo VIII en un pequeño oratorio ubicado donde fue sacrificada. En el quinto sector del circo. Año 304 a. c. Era Diocleciano. Hasta que otro papa, Calixto II -cuñado de doña Urraca-, lo elevara a templo. Como así fue desde 1123 a 1575. Después llegaron los Panphili.

piazza-navonaDel siglo XVII es la actual configuración de esta hermosa plaza, que nunca ha perdido su carácter lúdico. Durante el medievo se llamó Campus agonis. En ella se celebraban torneos. Las Fiestas de Carnaval. Desfiles. Todavía hoy Piazza Navona es una fiesta permanente, porque por allí pasa todo lo que hace ruido en Roma. Que se contempla desde otro tipo de gradas. Bernini. Nettuno. Tre Scalini. Il Barrocco. La Dolce Vita. La Bevitoria. Bar Navona. Don Chisciotte. Domiziano. Tucci. Un conjunto de cafés, bares, ristorantes y pizzerías que circundan la plaza. Compartiendo espacio con dos de las tiendas de juguetes más populares de Roma, Al Sogno y Berte. Y con el Instituto Cervantes, cuya librería exibe en escaparate obras españolas. Junto a la basílica de Santa Agnese -fruto de la transformación del segundo templo dedicado a la mártir-, otros dos edificios señoriales se suman a la solemnidad de Piazza Navona. Están frente a frente. El santuario de Nostra Signora del Cuore di Gesu y la embajada de Brasil. Ambos están levantados sobre los muros del stadium Domiciano, pero el primero tiene pasado español. Cuando el Papa Nicolás V puso en manos de la Nación Española en el siglo XV la manzana donde su ubica. Como albergue de peregrinos, hospicio y hospital. Levantando también un templo dedicado a la par a Santiago el Mayor y a San Idelfonso de Toledo. Llegando a ser Iglesia nacional de los españoles. Hasta que a finales del siglo XVIII nuestros compatriotas la abandonan mudándose a Monserrat, a donde se llevan la escultura original de Santiago que la presidía. Obra de Sansovino. La embajada de Brasil se ubica desde los años veinte en lo que fue el Palazzo Panphili, remozado por Inocencio X al tiempo que se construía la actual basílica de Santa Agnese. Espectacular para quien pasea de noche por Piazza Navona es contemplar la galería iluminada a través de su ventana serliana. La que da al exterior, justo en su primera planta. Y que alberga frescos de Pietro de Cortone sobre la estancia de Enea en los cielos del Olimpo. Contada por Virgilio, de quien Inocencio X aseguraba ser descendiente.

Piazza Navona es de mis lugares preferidos de Roma. Por la que he paseado en estos primeros días de diciembre, que es el momento del año donde su solemnidad monumental compite en igualdad con el murmullo de ilusión que le proporciona una feria que allí se instala como preludio de la Navidad. Feria romana, con barracas de tiro al blanco, puestos de torrone morbido e duro. De peladillas de mandorle y nocciole. También de noccioline. De algodón de azúcar. De panini de porquetta d’Aricia y vinos de Castelli. De dulcería del Lazio. Donde niños y mayores acuden a completar sus belenes napolitanos. O ya puramente romanos. Donde se exhiben cerámicas, guirnaldas y juguetes. Sean artesanos, clásicos o góticos, que es ahora moda. Donde se eligen regalos. Donde se comparte felicidad. O se prueba suerte. En Lottería Italia. Para el primer sorteo del año. Aquí Entracione, en España del Niño. 6 de enero, 5 millones de euros. Titiriteros. Peruanos que interpretan El cóndor pasa. Joan Baez en la voz de una joven atada a su guitarra. Niños que lloran. Otros que rien. Entre puestos de castañas. Ilusión de Navidad en aquel viejo stadium de Domiciano. Frente a Santa Agnesse, en cuya sacristía Sebastiano Brusco interpreta al piano a Mozart. A Schubert. A Beethoven. A Nino Rota. Y donde Francesca Rebecchini hace lecturas poéticas de Petrarca, de Boccacio, de Ariosto y de Tasso. Feria romana ésta. De caballos esculpidos por Bernini, por Giacomo della Porta. Caballos de piedra que encuentran compañia ocasional en un viejo carrusel alemán del siglos XIX que gira en medio de la plaza a ritmo de valls. Antiga giostra a cavalli, antiga piazza de Roma. Que este paseante abandona dejando atrás el murmullo navideño. Que no el del Imperio. Buscando ahora Campo dei Fiori. Otra piazza. Otra música. Otra historia. Bella ciao, bella ciao!

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    43 opiniones en “Piazza Navona”

    1. EXCELENTE DESCRIPCION DE UNA PLAZA MAGICA DE ROMA. COMO DICE CARMEN POSTIGO, NO TENGO NADA QUE AÑADIR. BELLISSIMO!!!!!!!!!!!!!!!

    2. Eres la Carmen Postigo, la de agencia Efe de Roma? Tu si que conoces bien Navona porque allí está tu trabajo, no? Grazie tante.

    3. La mas famosa de todas las plazas romanas y centro por excelencia de la Roma Barroca. Como en toda la ciudad, centro histórico de nuestra cultura y la única de todas las antiguas civilizaciones, que sobrevive en el mismo marco, en Piazza Navona la historia y el presente cohabitan con naturalidad. Y Fernando, como siempre lo ha descrito de lujo.

    4. Maravillosa ciudad Roma y cuanta belleza concentrada en una sola plaza¡¡¡, a la que tu nos acercas con tanta precisión historica y a la vez con una familiaridad entrañable.

    5. Como siempre Fernado haciendo nos viajar con la imaginacion y conociendo lugares increibles y hermosos como lo es Roma.
      La historia,sus costumbres,sus recuerdos son muy interesantes y bellos gracias por el interes que pones en cada bloc para que podamos leerlo y conocer muchos mas de los diferentes lugares que visitaste y conociste.

    6. He tenido el placer, reciente, de visitar Roma esta primavera. Realmente la Piazza Narvona es magnífica.
      En realidad toda Roma es magnífica, y nunca me canso de pasear por sus calles pues en todas hay un pedacito de historia, un rincón romántico, y sobre todo posar mi mano sobre cualquiera de sus monumentos y pensar que otros serés, ya hace tantos siglos, los crearon, tocaron o disfrutaron de su presencia, me hace sentir algo muy especial.

    7. He estado varias veces en Roma y en todas las ocasiones he dado un paseo nocturno por la Piazza Navona. Creo que voy a imprimir este post y guardarlo con las fotografías que he hecho en esa plaza mágica.

    8. La has descrito tal y como la recuerdo, llena de arte, llena de vida, con cafés para sentarse y disfrutar placidamente del espectáculo monumental y a la vez de su bulliciosidad. Tuve la suerte de tener un guia excepcional en mi primera visita a Roma, el periodista Rossend Domenech, buen amigo de mi familia. De esa primera visita, inicio de muchas otras guardo un grato recuerdo, que ahora tú has reavivado con tu excelente y bellisimo artículo.

    9. Efectivamente, un lugar emblemàtico de Roma, toda ella una maravilla y la gran sorpresa de mi vida. Cuando alguien te recomienda un restaurante, un libro, una película, casi siempre sales un poco desazonado de no haber sabido ver aquello que el otro sí ha sabido. Con Roma no pasa esto. Desborda. Es tan monumental como entrañable. Cada punto es un punto de referencia que te ayuda a encontrarte cómodo en ella y a no perderte, como si estuvieras en tu casa, aumentado esta sensación con el desparpajo y calidez de sus habitantes.
      La desbordante lujuria de escultórica y aquitectónica me dejo, en su dia empequeñecida. Secillamente, no me lo esperaba. Todo era poco. No conformes con Roma mi pareja y yo (hay que estar en Roma debidamente aparejado) visitamos palacios, palacetes, ruinas, vias, fuentes… todo ello en los alrededores. Y se quedó la biblia en el tintero. Nos está esperando. Volveremos otra vez aparejados. Gracias por tan vívida descripción

    10. Magistral artículo, poco se puede decir más de la Piazza Navona, la historia de la piazza bellamente descrita con todo lujo de detalles.
      En mi opinión una de las plazas mas bellas donde el arte barroco luce su magestuosidad y opulencia,
      Al visitarla sorprende que sea el punto de encuentro de turistas y romanos y que se queden en la piazza para cenar ,tomar una copa o ir de discoteca, razón por la cual siempre esta abarrotada.
      Suscribo integramente el comentario de Mª Angeles Santiveri,persona que me consta que que conoce a la perfección Roma y que la ama.

    11. El barroco italiano es increiblemente bello, Y, la Piazza Navona y la Fuente de los 4 Rios son grandes ejemplos, te dejan sin respiracion. Cuando caminas por ahi, te imaginas a Bernini creando esta obra magistral y gozando, porque, hoy despues de tantos siglos la gente se diviere y convive en los cafes , bares, Y sueñan a ser niños en esa tienda unica de juguetes. …Que maravilla de relato gracias fernando

    12. Piazza Navona para mi una de las plazas más bonitas del mundo, la descripión que has hecho traslada casi virtualmente al lugar.

    13. Cosa bella. Buena Descripción de una histórica plaza con atmósfera de larga diplomacia y finezza romana. Orgambides prenotate una távola en La Pérgola o la Due Sorella cercanos a Piazza Navona. AUGURI.
      *
      Esta noche te brindare un Ripasso de Amarone de Valpoliccella

    14. Cuando camino por lugares tan hermosos como lo es esta Plaza, con toda su historia, sus creadores…. De dia, o de noche…Iluminada por el sol o por la luz de las farolas…. En diciembre, con su feria o en pleno carnaval. Por que si… Esta plaza siempre esta viva…

    15. He visitado varias veces Roma y no me ido de ella sin cenar o tomar una copa en la Piazza Navona, una plaza de las mas bellas del mundo, en ella se encuentra la iglesia de Santa Agnes cuyo interior si te adentras en los sótanos estan visibles los restos de la iglesia primitiva y del estadio de Domiziano. Iglesia que resalta su fachada cóncava y convexa para dar mas realce y sensación de grandiosidad.
      El autor de la fontana dei Fiumi que justo está enfrentada con la Iglesia de Santa Agnese, decidió colocar sus personajes, protegiéndose la cabeza con las manos pues decia que la fachada de la Iglesia no duraria de pie. Menos mal que se equivoco.

    16. Sorprendido estoy por la calidad de este post romano que describe con exactitud matemática esta piazza de Roma que llevo emocionalmente conmigo. Mi más cordial enhorabuena porque la has pintado como lo harían los maestros clásicos.

    17. TENGO HERMOSOS RECUERDOS DE LA PIAZZA NAVONA QUE HOY ME LOS HAS DESPERTADO CON ESTE ESPLENDIO ARTICULO, FERNANDO. AHI ESTARA SIEMPRE NEPTUNO CON SUS CABALLOS MARINOS, EL RECUERDO DE LA MARTIR, LA MAGISTRAL OBRA DE BERNINI, EL LEGADO DE BORROMINI, LA ALEGRIA DE ROMA, EL PASADO ESPLENDOROSO DE LOS ESPAÑOLES, LAS INTRIGAS DEL IMPERIO, LA DECADENCIA QUE LE SIGUIO Y LA BELLEZA ARQUITECTONICA Y MONUMENTAL QUE SE “HIZO LUZ” GRACIAS A AQUELLOS PAPAS MECENAS A LOS QUE TANTO DEBE LA CIUDAD ETERNA. tODOS LOS CAMINOS LLEVAN A ROMA, PERO EL TUYO ES COMO UNA VIA RAPIDA QUE TE INTRODUCE EN SUS ENTRAÑAS, QUE SIN DUDA ES ESTA PLAZA BELLISIMA Y EMBLEMATICA.

    18. Llego a mi casa de fin de semana, enciendo el ordenador y me encuentro con este magistral articulo de una plaza que la la primera vez que la vi me impresionó hasta el punto de dejarme una huella imborrable. Esta noche la he vuelto a recrear con tu descripción y he recordado momentos apasionantes vividos en roma y muy especialmente en Navona. Pero sobre todo he descubierto toda esa historia que nos cuenta y que yo en parte desconocia. Gracias, Orgambides, por recordarme tan buenos tiempos. Ahora sí que estoy deseando volver a Roma.

    19. Esta plaza es una hermosura. La visito siempre que viajo a Roma, la última vez este verano. Me gusta callejear por Roma y llegar de repente a la Plaza Navona, que es como un gran escenario de la historia de la ciudad, con esas fuentes gigantescas con figuras mitológicas de donde surte el agua como cascadas. Me gusta mucho la plaza Navona y también la Fontana de Trevi, que es una de las grandes maravillas de la humanidad. Estas dos obras han salido de la mano de genios y al contemplarlas comprendo la fuerza que tenían los Papas con los artistas, como Rafael, Miguel Ángel o estos otros, Borromini y Bernini.

      Fernando, este artículo con el que nos has sorprendido hoy es verdaderamente de lujo. Sigo tu blog desde casi el principio y nunca me había atrevido a dejar un comentario, pero esta vez no he podido resistirme porque me has llevado a un lugar que tengo grabado y al que siempre quiero volver, ahora con más gusto. Gracias, maestro.

    20. Sí, por favor, Campo dei Fiori… Tengo grandes recuerdos de esa otra piazza tan popular de Roma, con su gran mercado y tiendecitas populares en sus alrededores. La verdad que Roma es tan bonita que cualquier rincón es atractivo. Qué ilusión que me la recuerdes.

    21. Roma “passejar i civilitzar-se”, eso lo dijo Josep Pla, que vivió una larga temporada en Roma y escribió sobre ella.

      Fernando, con tu impecable narración histórica, artística, a la vez que cálida descripción, nos das un ilustrativo , pero también cotidiano y entrañable paseo, por una hermosa plaza. Y de tu mano vamos caminando y paseando, por esos mundos, que también conoces y nos vamos “civilizando”.
      Gracias.

    22. Quien pudiera escaparse ahora mismo y viajar a Roma, y sentarse un ratito en uno de los cafés de la Piazza Navona, o porque no, en la heladeria, y contemplar durante unas horas el conjunto escultórico de los 4 ríos. Todavía tengo grabado el impacto que me produjo la primera vez que lo ví. Realmente parece que se están protegiendo del derrumbe de la iglesia! ¡Que maravilla! Gracias Fernando, por estos viajes desde el sillón del despacho.

    23. Visité la Piazza apenas en tres ocasiones. En distintas estaciones, eso sí. Me falta otoño. Como a Ángeles, el artículo me ha despertado bellos recuerdos. Gracias Fernando por permitirme viajar de nuevo a los lugares más hermosos, sorteando el frío que me rodea.

    24. Una de mis ciudades favoritas es Roma,en la que me siento como en casa, sus plazas son las mas bonitas del mundo y Plaza Navona, para mi es la plaza por excelencia. Y tu minuciosa descripción me ha hecho descubrir rincones en los que no había reparado.

    25. Yo también, he tenido la suerte en estos dias de pasear por Plaza Navona, majestuosa, imponente, y a la vez alegre, bulliciosa, popular. La he disfrutado. Pero que bueno ha sido, verla de nuevo a tráves de tus ojos, con este magistral post que nos brindas.
      Gracias, por hacerme revivir tan bonitos momentos.

    26. Con ocasión de la canonización del Padre Mañanet, el colegio de mi hija organizó un viaje a Roma, la verdad es que pasamos mas horas en el Vaticano que en otro sitio, pero uno de los lugares que visitamos fue Plaza Navona, la recuerdo preciosa, ahora tu, con tu artículo me lo has reconfirmado.
      Gracias

    27. He ido varias veces a Roma, pero nunca hasta hoy he vivido y comprendido tan bien Plaza Navona, me pareces un escritor, articulista y narrador excelente.

    28. Muy bien Fernando hoy me tienes en Italia en una Plaza magica, comiendo una deliciosa pizza con el canto de las fuentes y por supuesto una copia de tu relato para seguir disfrutando muchas gracias

    29. De mi estancia en Roma recuerdo con gran cariño el paso por La Piazza Navona ya que es considerada por algunos co mo una de las mejores plazas del mundo e incluso uno de los lugares más románticos de la tierra, y estoy completamente de acuerdo con lo que se dice y por algo será.

      La Piazza Navona es una de las plazas más elegantes de la capital italiana, rodeada de edificios y esculturas de Bernini, Borromini y otros artistas barrocos. Aún conserva la forma alargada del estadio que Dominicano mandó construir en el siglo I para albergar competiciones de atletismo. Entonces se llamaba Stadio Domiziano o Circus Agonalis y tenía capacidad para 30.000 espectadores. En ella se han llevado a cabo también representaciones teatrales y carreras de caballos. Así que es un lugar con mucha historia…

      En el centro se alza la que muchos creen la mejor obra escultórica de Bernini, la Fontana dei Quattro Fiumi o Fuente de los Cuatro Rios: imprescindible una foto frente a ella. Junto con la Fontana de Trevi, es uno de los mejores ejemplos de urbanismo barroco. El obelisco que la corona parece suspendido en el aire, y las figuras que la rodean transmiten una fuerza magnífica, acorde con la grandeza de los ríos que representan.
      Que voy a decir si Fernando lo describe mejor que yo. Dedico esta poesia de un autor desconocido a todos los enamorado.

      Hoy solo soy un ser vivo
      y sigo mi puro instinto
      oigo subir la marea
      veo los colores del viento
      toco mi propio pensamiento
      tu eres mi universo entero
      y la esencia de mi deseo
      ¿Que importa el mundo entero?
      Que es nuestra pasion si no imaginacion
      beber de tus labios con fruicion
      morder lamer tu tersa carne
      dibujar tus formas con amor
      rozarme e impregnarme de tu olor
      entrelazarnos en un mar de caricias
      y explorar tu cosmos interior
      sentir al fundirnos que convulsos morimos
      ¿Que importa el mundo entero?
      Hoy solo soy un ser vivo
      imperfecto en todo sentido
      pero solo yo trazo mi destino
      sin conocer el final del camino
      que no importa llegar si no andarlo
      al cruzarnos y mirarnos perdi el paso
      imposible fue no tomarte de la mano
      y ahora para este caminante
      tus ojos son el rocio del alba
      tu sonrisa cuando alumbra el dia
      tus lagrimas la lluvia que trae la vida
      tu voz un rio de agua cristalina
      ¿Que importa el mundo?
      Si el mundo eres tu …

    30. Roma, en cualquier estación del año es bonita, pero a mi especialmente me gusta en primavera entonces los pintores y artistas callejeros, sustituyen a la feria navideña, el carrusel y a los puestos de lotería. Y siempre es un placer sentarse en cualquiera de sus cafés y tomarse un capuccino, un helado, comer una buena pizza, viendo maravillosas esculturas, bellisimos edificios. Y ver el constante pasar de foráneos y turistas, admirando tales maravillas.

    31. Plaza Navona es el lugar ideal para descansar y tomar fuerzas, para seguir pateando Roma, admirando todas sus maravillas arquitectónicas y escultóricas, sentada en uno de sus encantadores y carisimos cafés.

    32. Roma una de las ciudades que es inevitable no imaginarsela, una ciudad con tanta historia y con tantos años con esas esculturas maravilloras. Fernando la verdad que eres un buen narrador de los lugares que has conocido ya que nos llevas a imaginar haber rrecorido esos lugares que con tanto interes nos describes.Ojala pueda conocer Roma algun dia y poder contarte mi experiencia.

    33. Anch’io Fernando amo molto piazza Navona. Anche se la conosco perfettamente, ogni volta che vi giungo da una delle stradine laterali rimango colpito da tanta magnificenza come se fosse la prima volta. Del resto tutta Roma è sorprendente, le cose da vedere infatti non si esauriscono mai. A me piace molto passeggiare anche per Campo dei Fiori con la sua aria trasandata, per poi passare a piazza Farnese dominata dall’imponente palazzo dell’ambasciata di Francia, così diverso dalle altre case che sembrano cresciute per caso , e da una laterale arrivare fino a via Giulia. E’ ancora la Roma più autentica dove a volte il tempo sembra essersi fermato.

    34. Roma me encanta, lo he comentado ya en alguna ocasión, la vieja Roma… Tengo debilidad por el Pantheon, creo que es una de las cosas más hermosas que he visto nunca, lo que hace que me guste, y mucho, la pequeña plaza que surge, algo caótica, en su antepuerta. Piazza Navona no tiene nada que ver con la del Pantheon -salvo por el bullicio del ir y venir constante de turistas- y solo si no las comparo puedo decir que también me gusta.

      Cuando me topé con ella, por la tarde-tarde, finiquitada una jornada de mil y una reuniones, recuerdo que pensé… es enorme! Llena a reventar, como casi siempre y sí, empecé mi paseo por ese gran rectángulo con muchas reservas, casi prejuicios, diría yo. Cogida del brazo de mi cicerone particular, la recorrimos de cabo a rabo… pintores y músicos aficionados, fotógrafos, malabaristas, mochileros, señoras con bolsos de marca y gafas de diseño, turistas de todos los colores, el ruido del agua, Fontana dei Quattro Fiumi, tabernas, baretos y terrazas… y gente, mucha gente, no hay una mesa libre.

      Optamos por hacernos con un helado en una gelateria coqueta y llena de mezclas de mil sabores y hasta yo, que no soy nada dulcera, sucumbo ante una bola oscura con nata y trozos de chocolate, una pequeña maravilla con nombre de comedia francesa, Tartufo.. pero qué cosa más rica!!

      Y con mi Tartufo y el capuccino frío de Antonio, nos sentamos en una esquina de la fuente de Neptuno. Me contó que durante mucho tiempo la parte central de la plaza era cóncava y que para según qué festejos se cerraban los desagues de las tres fuentes, dejando desbordar el agua hasta inundarla, formándose el “Lago de plaza Navona” que servía de diversión a pobres y ricos durante algunos días de verano. Hasta que a mediados del XIX un Papa –no recuerdo quién- acabó por prohibirlo, luego la plaza se pavimentó y se construyó la acera central, tan característica hoy. Y Piazza Navona pasó de cóncava a convexa. Y terminé comprando dos fotografías o algo así, una en la que se intuye la piazza cóncava y otra en la que se ve la moderna piazza convexa en todo su esplendor. Cada vez que las miro me sigo diciendo… es enorme! Porque, ciertamente, lo es. Y como bien dice Fernando “… todavía hoy Piazza Navona es una fiesta permanente, porque por allí pasa todo lo que hace ruido en Roma…”, un rincón lleno de vida, sin duda, en el que hasta las estatuas de sus fuentes parecen cobrar vida cuando cae la tarde.

      Me sigo quedando, si tuviera que elegir, con la coquetona plaza del Pantheon, pero no niego que Piazza Navona es mucha plaza. La buena compañía hizo el resto… o fue el Tartufo, quizás? Qui lo sa…

    35. Form year I went on holiday to Macedonia and I requisite disclose that it was a good determination, especially because of the base prices. It’s abundance to fathom there, not only unspoiled beaches, but also hilarious mountains and endless forests. The lone disadvetage was that there were too tons tourists. My neighbourhood: ship warszawa

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